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En sus primeras etapas, la gestión de estos Junto con estos avances, igual que ocurre
riesgos se realizaba de manera manual. Las
empresas utilizaban procesos manuales para
rastrear y evaluar a sus proveedores. Estos
procesos podían funcionar, pero no eran
eficientes. Lejos de cubrir las necesidades y
eran propensos a muchos errores. La falta de
automatización y la dependencia de sistemas
rudimentarios dificultaban la obtención de
una visión clara y en tiempo real de los riesgos
que podían afectar a la organización.
Con el avance de la tecnología, las soluciones
para TPRM comenzaron a evolucionar.
Las primeras herramientas de software
dedicadas a esta tarea, permitieron a las
empresas organizar mejor la información y
seguir de cerca a sus terceros. Sin embargo,
estas soluciones iniciales aún presentaban
limitaciones significativas, sobre todo en
cuanto a la integración con otras plataformas
y la capacidad de realizar análisis exhaustivos
de la información de los proveedores.
A medida que las tecnologías avanzaban y
28 la digitalización se expandía, las soluciones
de TPRM se volvieron más sofisticadas.
Estos avances incorporaban capacidades
de automatización, explotación de la
información, claridad en los análisis… y esto,
a su vez, se traducía en eficiencias que traían
ahorros en tiempo y recursos. Adicionalmente
a estas eficiencias, se mejoró enormemente
la precisión y consistencia en la gestión de
riesgos.
“Gracias a las
funcionalidades
relacionadas con la
IA, las organizaciones
pueden analizar grandes
volúmenes de información,
identificar patrones
y tendencias, tomar
decisiones informadas
basadas en datos precisos,
realizar lecturas de
certificados y documentos
automáticamente”
La revista de las Compras del siglo XXI
en muchos otros ámbitos, a medida que
evolucionaban el control de los riesgos,
también lo hacían las técnicas para explotar
las brechas de seguridad, la realización de
ciberataques y las formas de impactar en las
cadenas de suministro de las organizaciones.
Y de la mano de esta evolución, aparecen las
mejoras en la ciberseguridad asociada con
TPRM. Las soluciones actuales son capaces de
identificar amenazas cibernéticas emergentes
y sugerir medidas preventivas antes de
que se conviertan en un problema. Esto es
especialmente importante en un mundo
donde las amenazas están en constante
evolución y las organizaciones deben estar un
paso por delante para proteger sus activos y
datos.
El cumplimiento normativo es otro aspecto
crucial que ha impulsado la evolución de estas
soluciones. Existen numerosas regulaciones
que han obligado a las empresas a ser
más diligentes en la gestión de los riesgos
asociados con terceros. Frente a estas
regulaciones, las soluciones tecnológicas
actuales no solo ayudan a cumplir con los
requerimientos, sino que también facilitan
la gestión de auditorías y la generación
de informes. De esta forma, las soluciones
de gestión de riesgos pasan de ser una
herramienta facilitadora, a algo prácticamente
indispensable y mandatorio.
En los últimos años, debido a las regulaciones
anteriormente mencionadas y al aumento de
brechas de seguridad, cyberataques, fugas
de información… ha surgido una tendencia
hacia la evaluación y el monitoreo continuo
de terceros. En lugar de realizar evaluaciones
estáticas y puntuales, las empresas ahora
pueden monitorizar constantemente a sus
proveedores y partners, detectando cambios
en su perfil de riesgo prácticamente en
tiempo real. Aspecto fundamental en un
entorno donde los riesgos evolucionan
rápidamente y las amenazas surgen de forma
inesperada.
Otro punto clave que ha ido ganando terreno
últimamente en el ámbito de TPRM, es la
incorporación de funcionalidades relacionadas
con la IA. Gracias a estas funcionalidades,
las organizaciones pueden analizar grandes
volúmenes de información, identificar
patrones y tendencias, tomar decisiones
pueden conectar datos de diversas fuentes,
“Los equipos de gestión
de riesgos de terceros
están capacitados para
anticiparse a posibles
problemas y tomar medidas
preventivas antes de que se
conviertan en una amenaza
real”
informadas basadas en datos precisos,
realizar lecturas de certificados y documentos
automáticamente…Todas estas mejoras han
permitido que los equipos de riesgos se
concentren en aspectos más estratégicos,
mejorando la eficiencia general del proceso.
Sumado al punto anterior y centrándonos
en esas capacidades actuales en relación
con la explotación de la información, las
soluciones actuales están infinitamente más
integradas. Esto significa que las compañías
La revista de las Compras del siglo XXI
como bases de datos internas, proveedores
externos de información y sistemas de
gestión de relaciones con proveedores, para
tener una visión más completa y precisa de
los riesgos. Con toda esta información, los
equipos de gestión de riesgos de terceros
están capacitados para anticiparse a posibles
problemas y tomar medidas preventivas antes
de que se conviertan en una amenaza real.
Desde Aquanima Grupo Santander, como
pioneros y expertos en gestión de riesgos
de terceros, hemos visto crecer poco a poco
este mundo de TPRM desde sus primeros
pasos, hasta verlo correr a las velocidades
actuales. Y no nos cabe duda, de que seguirá
evolucionando incluso más deprisa en los
próximos años.
Por ello, podemos decir que estamos más que
preparados, tanto por nuestras innovadoras
soluciones tecnológicas, como por el dilatado
conocimiento de nuestro equipo de expertos
El tándem necesario para poder seguir de
la mano a esta (r)evolución de la gestión de 29
riesgos de terceros y afrontar los grandes retos
que nos demanden nuestros clientes.
ARTURO CALLEJO
Digital Transformation –
TPRM Expert
Aquanima Grupo Santander